martes, 28 de agosto de 2012

Ciccone


Ongaro apoya el rescate de los Ciccone
            El apoyo de la Federación Gráfica Bonaerense a la expropiación de la ex Ciccone, expresado en un comunicado y entrevistas a diversos dirigentes, busca disimular su completa impotencia ante la larga declinación de la empresa.
            La burocracia ongarista se suma ahora al coro que defiende el arbitraje estatal como “una recuperación de soberanía en la línea de lo hecho con YPF” e incluso como un paso trascendente en “la integración de la patria grande latinoamericana” (?) afirmando falsamente que “es algo que veníamos sosteniendo a través de los años”.
            Pero la realidad es que Ongaro se ubicó siempre, por acción u omisión, junto a alguno de los grupos capitalistas - ligados a distintas fracciones del poder - que se disputaron el control de la compañía. Y sobre todo junto a los hermanos Ciccone.
            En el 2009, durante uno de los tantos períodos de paralización de la planta, Ongaro se dedicó a gestionar por intermedio de las Madres de Plaza de Mayo apoyo financiero oficial y hasta aportó dos millones de pesos de los fondos sindicales para el pago de salarios.
            Luego, en el 2010, cuándo se canceló el contrato de alquiler de Boldt y  se levantó la quiebra que permitió el ingresó de The Old Fund, puertas adentro, los representantes sindicales defendieron sin reparos la gestión de Tabanelli.
            Incluso cuando el escándalo Bodou-Vandenbroele estaba en todos los titulares y la prometida impresión de billetes llevaba ocho meses sin despegar,  el sindicato publicó una solicitada reclamando “que los billetes que alguna vez se hicieron en Brasil o en otros países deben hacerse ahora en Argentina”, sin rozar siquiera el tema del negociado.
            Y ahora que el derrumbe de esa operación fraudulenta obligó al gobierno a intervenir para rescatar a la empresa e intentar  salvar a Boudou y los involucrados, el sindicato se vuelve a revelar como un mero compinche del nacionalismo patronal que mantiene a los trabajadores como convidados de piedra.
            En síntesis: en ningún momento la Federación Gráfica Bonaerense exigió la estatización de la empresa como sí lo hizo la Naranja Gráfica. Ahora, con al empresa quebrada y ante un caso de lavado de dinero, avaló el rescate de los empresarios quebrados, que deberían pagar con sus fortunas las deudas a la AFIP, cuyas máquinas y edificio deberían pasar al estado sin compra alguna del paquete accionario y preservando todos los puestos de trabajo y el convenio colectivo gráfico.
Impulsamos inmediata asamblea general –que no se ha hecho- para fijar una posición sobre temas vitales como la apertura de los libros y el fin de los curros, el encuadramiento convencional, el control obrero de la producción y la formación de un directorio integrado mayoritariamente por representantes de los trabajadores votados en asamblea, rotativos y revocables.


Miguel Bravetti

jueves, 23 de agosto de 2012

Ciccone, una radiografía del estatismo oficial



Los senadores y diputados oficialistas que defendieron la expropiación de Ciccone en el Congreso lo hicieron en nombre de la ‘soberanía monetaria’. Naturalmente, la capacidad de imprimir billetes en una planta propia no le da ‘soberanía’ a un régimen que emite moneda para subsidiar a privatizadores, o sostener la especulación con la deuda pública. En cualquier caso, el kirchnerismo sólo llegó a la estatización después de haber fracasado en una re-privatización de la gráfica con fondos turbios, impulsada desde el propio gabinete. La justicia investiga al vicepresidente por su participación en ese negociado, que lo tendría cerca del procesamiento.
El gobierno dice que “no pagará un peso” por la gráfica, ya que podría compensar el valor de sus activos con la deuda acumulada con la Afip. Los que afirman esto no tienen en cuenta que, a través de ese arreglo, los actuales accionistas dejarán de pagarle al fisco unos 250 millones de pesos. Pero la expropiación “sin pago” no pasaría de una expresión de deseos. Ocurre que “hay acreedores en el concurso con privilegios mayores que la Afip” (La Nación, 9/8). Según algunos especialistas, la vía elegida por el gobierno, la expropiación de las acciones de la gráfica -y no de sus máquinas- es “un proceso más rápido, pero muchísimo más costoso” (La Nación, idem). Acaba de revelarse que entre los aportistas a la misteriosa sociedad que pasó a controlar Ciccone están los banqueros Brito y Moneta. En estas condiciones, la expropiación no sólo encubriría el negociado anterior, sino también facilitaría otro rescate de intereses privados con los recursos del Estado. Como prueba de ello, ninguno de los supuestos expropiados -los nuevos accionistas de Ciccone- han abierto la boca contra la medida oficial. El mismo Vanderbroele, según informan los diarios, habría servido de nexo entre los Ciccone -hoy accionistas minoritarios- y el Estado, en torno de este arreglo.
Adicionalmente, la expropiación buscaría tapar el vaciamiento de la Casa de Moneda, que tuvo como contrapartida la tercerización en la producción de billetes. El último de ellos, con la ‘nueva’ Ciccone, se vino abajo con el escándalo de Vanderbroele-Boudou.
Frente a estas imputaciones, el oficialismo ha defendido el proyecto afirmando que las investigaciones judiciales sobre Ciccone “corren por cuerda separada”. Con el mismo argumento, Juez y Solanas se han plegado al kirchnerismo, y “confiando en la justicia”. Los diarios oficialistas, sin embargo, anticipan que el caso Ciccone- Boudou podría terminar en la justicia con un gigantesco cero. En el recinto, Pino Solanas habló contra las ‘mafias’, pero terminó dando un cheque en blanco a este salvataje mafioso. El mismo que otorgó a la ‘nueva’ YPF, que, una vez “estatizada”, salió de inmediato a negociar con Chevron y Exxon Mobil.
En el senado, Luis Juez también levantó la mano, en disidencia con los senadores del FAP y de Morandini, la otra integrante del juecismo. En Diputados, el FAP se partió en tres, con los juecistas votando a favor, los socialistas y el GEN en contra y la abstención de Lozano. La expropiación de Ciccone dejó ver la inconsistencia del bloque centroizquierdista que se plantea como “alternativa” al gobierno.
Toda esta operación de rescate económico y político de grupos capitalistas nada tiene de ‘nacional’. Pero en lo sustancial, reitera toda la saga de las estatizaciones kirchneristas.
Para fundamentar el voto por la expropiación, el senador oficialista Fuentes dijo que “el estado es el único que hoy tiene capacidad para acumular capital, dirigir y planificar la actividad con los privados”. (La Nación, 20/8). Pero ninguna de las estatizaciones kirchneristas es el resultado de un plan deliberado. Han sido impuestas por la crisis capitalista y el “derrumbe” del modelo. Ciccone-Boudou-Brito se inscribe en la línea de YPF -Esquenazi o TBA-Cirigliano. Ciccone es sólo la versión grosera del estatismo kirchnerista, que es siempre una variante de rescate del capital.

domingo, 12 de agosto de 2012

MARIANO, UNA NUEVA ETAPA


MARIANO, UNA NUEVA ETAPA


La lucha por la condena a los responsables del crimen de Mariano y del daño sufrido por nuestra compañera Elsa Rodríguez ingresó en una nueva etapa.
Una fase aún más dura y encarnizada, adentro y afuera de los tribunales.
Adentro, enfrentamos las tentativas dilatorias de los abogados de Pedraza, la patota y los policías involucrados.
Han exigido, de nuevo, postergar el juicio, impugnar su desarrollo y hasta las evidencias que pesan en su contra.
Pero los videos que ellos mismos pidieron proyectar fueron abrumadores.
Por la sala del tribunal desfiló la trama de un crimen político perpetrado por la burocracia sindical con el concurso necesario de la Policía Federal, los capitalistas de la concesión y el aparato ministerial de Transporte y Trabajo.
Esta trama es la misma que después llevó a la tragedia de la estación Once.
El mismo gobierno, que se encuentra entrelazado a todos los protagonistas de esta trama perversa, ha emprendido la misión imposible de adjudicarse el comienzo del juicio.
Se trata de un desatino, en momentos en que la ‘CGT Balcarce’ –de la Rosada– acoge en sus filas a la burocracia de la Unión Ferroviaria, en cuya sede se reunirá el Confederal que reclamará luego la legitimidad al Ministerio de Trabajo.
O cuando el servicio penitenciario del “Vatayón Militante” ha sacado a pasear, también, a Cristian Favale.
La burocracia de la Unión Ferroviaria ha lanzado incluso un ultimátum: en una solicitada publicada en La Nación anuncia la “defensa incondicional” de sus miembros, o sea con independencia de que sea probada su participación criminal.
El juicio que se inició el lunes es el producto de una movilización popular que doblegó, hasta ahora, las maniobras políticas de la impunidad; para derrotarlas en forma definitiva se necesita más movilización.
Debemos encarar la nueva etapa con un espíritu de movilización creciente y con la conciencia de que no se juzga un crimen individual, sino un crimen político de la clase capitalista, la burocracia sindical y el Estado contra la clase obrera, contra su juventud militante y contra la democracia política.

viernes, 3 de agosto de 2012

LOS COMPAÑEROS DE MORVILLO SE PRONUNCIAN

Trabajadores de morvillo exigimos perpetua a pedraza y a su patota y ala policia a la patronal de ugofe y a los responsables politicos, este lunes 6 a las 8 hs vamos todos a comodoro py . JUSTICIA PARA MARIANO FERREYRA

jueves, 2 de agosto de 2012

EL LUNES 6 DE AGOSTO, TODOS A COMODORO PY

LOS COMPAÑEROS DE INTERPACK PLANTA 1, TAMBIEN SE SUMAN A LA CAMPAÑA PIDIENDO JUSTICIA POR MARIANO. PERPETUA A PEDRAZA Y SU PATOTA

miércoles, 1 de agosto de 2012

LOS TRABAJADORES DE AGR CLARÍN SE PRONUNCIAN POR JUSTICIA PARA MARIANO FERREYRA Y PERPETUA A PEDRAZA


-Que paguen todos los responsables de este crimen contra la juventud y la clase obrera!. Incluidos policías, funcionarios y empresarios.
-Fuera las patotas sindicales.
-Abajo la tercerización y la precarización laboral.